sábado, noviembre 23, 2024
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A mi manerA

Por Julio Alejandro AGUIRRE PADILLA

*Patrulleros y grulleros, de cacería.

*Duro golpe a los bolsillos.

*Condonar multa, por el bien de todos.

La creatividad no consiste en una nueva manera, sino en una nueva visión. Edith Wharton.

Reza el dicho: ¡ahogado el niño a tapar el pozo! Ciertamente la mala calidad del aire ha traído grandes y graves consecuencias. La obligación de las autoridades de la Ciudad de México y del Estado de México es velar por la salud de sus habitantes.

Por primera vez no culparemos a los  gobiernos  de lo que estamos padeciendo –no es un su   totalidad-. Sabemos lo que hacen y provocan las fábricas asentadas en los límites vecinales. La naturaleza hace su parte con un calor intenso y la falta de lluvias. Y aunque nos duela reconocerlo los ciudadanos inconscientes que queman pastizales y aquellos que prenden fuego en bosques secos que con la mínima causa provocan incendios de tal dimensión que personal de Protección Civil se pasa días para sofocarlos.

En el Estado de México nunca se había aplicado Contingencia Ambiental Extraordinaria.  El Gobernador mexiquense, Alfredo del Mazo Maza, atinadamente ha suspendido las clases y otorgado una serie de recomendaciones a la ciudadanía para que este mal momento que vivimos no se prolongue.

Bajo esa prioridad nos parecen justas las medidas que se tomen. Es por el bien de todos, pero…

Aprovechando la circunstancia, algunas autoridades están haciendo su agosto en pleno mayo. Los operativos para detener automóviles que no estén verificados, son cargados en la grúa (que acompaña a las patrullas), lo que significa un negocio redondo con graves consecuencias para el presupuesto de millones de mexiquenses.

Mire usted, los ayuntamientos mexiquenses siempre, a principios de año, anuncian la condonación de multas para los ciudadanos que están atrasados en sus pagos de agua y predial. El aviso llega con tiempo y obviamente los resultados han sido provechosos para las arcas de los municipios.

Justamente eso esperamos los perjudicados ante las medidas necesarias, sí, pero drásticas donde  te bajan de tu auto, recibas tu infracción y se lleven la unidad en un abrir y cerrar de ojos.

Es un golpe tremendo para los bolsillos de muchos que no verificaron a tiempo porque (algunos), ni para comprar bolillos tienen.

No olvidemos que el país vive una crisis de desempleo alarmante, y la mayoría de las empresas que se mantienen vivas siguen despidiendo personal y otras están muy atrasadas en los pagos.

La medida de las autoridades puede ser necesaria pero nunca justa.

Para muestra un botón, aclarando que el protagonista de la historia que a continuación contaremos l sucede a quien escribe.

Durante diez años pagamos rigurosamente la tenencia y realizamos la verificación a nuestro automóvil, las dos veces al año… hasta el año pasado que dejamos de hacerlo.

Verificamos, entonces, ante la necesidad de viajar a la hoy Ciudad de México. Nunca tuvimos oportunidad de hacerlo. Eso de verificar se volvió llenar un “cochinito” de otros.

Hoy tengo el auto encerrado –pese a las excelentes condiciones mecánicas-. Ante el miedo de ser una presa más de esta cacería que han emprendido. Te agarran y serás obligado a pagar la multa por dicha falta, pagarás el arrastre al corralón con la enorme posibilidad que los grulleros te cobren una barbaridad por sacarlo, te roben objetos y partes del vehículo–también lo he sufrido-, te maltraten e insulten.

Hasta ahí ya van dos desembolsos. Para ponerte al corriente tendrás que pagar lo que antes era la tenencia y pagar la verificación, pero antes saldar la multa equivalente de $ 1,600.00 con el riesgo  que no pase la certificación y que el mecánico te lo revise (más gastos).

Pesos más pesos menos el chistecito andará saliendo en unos $ 5.000.00. ¿Pos con qué ojos, chato?

A las autoridades competentes: quiten la multa por no tener el carro verificado, sólo así saldremos ganando todos. Sólo así podremos hacer más con menos, digo.

San Isidro Labrador quita la mala calidad del aire y pon el sol… es bueno tener fe y contar y confiar en los santos que uno elija, sin embargo los habitantes del municipio de Metepec se pasaron de buena fe cuando festejando a su “santo Patrono” hicieron uso de la pirotecnia, justamente en los días de Contingencia Ambiental.

Tengamos nuestros santos, pero seamos sensatos.

Tal vez reí o tal lloré, tal vez/ tal vez gané o tal vez perdí/ ahora sé que fui feliz y si lloré también ame, puedo seguir hasta el final…A mi manerA.

Correo electrónico: aguirre@8columnas.com.mx

Alfredo Del Mazo Maza. Primero la salud.

Hacen su agosto en pleno mayo.

San Isidro Labrador. Lo festejan con pólvora.

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