BOSQUES TROPICALES
¡Los bosques tropicales están llenos de biodiversidad! Pueden albergar más de
100 especies de árboles diferentes y sus territorios representan alrededor del 80%
de las especies documentadas en el mundo.
En su nombre se encuentra una pista sobre la descripción de este ecosistema: los
bosques tropicales son bosques ubicados entre el Trópico de Capricornio y el
Trópico de Cáncer, muy cerca de la Línea Ecuatorial, en países de Sur América,
África y el sudoeste de Asia.
Se trata de un tipo de bosque de mucha frondosidad y mucha altura. Está
compuesto por una amplia variedad de especies de hoja grande, perennifolias,
capaces de mantener la humedad del entorno incluso durante la época seca.
Cabe señalar que, al estar en el trópico, este tipo de bosques tienen una
temperatura promedio entre los 20-25 grados centígrados, acceso a abundante luz
solar durante todo el año y lluvias frecuentes en la mayoría de sus territorios. Esto
permite el crecimiento de una gran diversidad de especies de plantas y animales.
En México, hay 31 millones de hectáreas de bosques tropicales y en ellos viven
una gran riqueza de mamíferos, aves y anfibios. Existen dos grandes tipos: la
selva alta húmeda y selva baja o seca. En estas se puede encontrar árboles de
hasta 30 metros de alto y una variedad de plantas que conservan su follaje todo el
año. Son lugares en donde llueve de gran manera y las temperaturas son
constantes todo el año. En este ecosistema viven cerca de 6 mil especies de
plantas y casi el 40% son endémicas.
Los bosques ofrecen una gran cantidad de servicios ecosistémicos, es decir los
componentes de los ecosistemas que se aprovechan y disfrutan de manera directa
al bienestar humano. Los beneficios que se obtienen de los bosques tropicales es
la gran cantidad de alimento debido a la abundancia de plantas, animales y
microorganismos que poseen, son una fuente de energía, de ellos se obtienen
materiales de construcción, medicinas, especies ornamentales y plaguicidas.
Otros beneficios son la regulación del clima del planeta. Los bosques tropicales
albergan la mayor cantidad de carbono, absorben gran parte de la energía que
proviene del sol transformándola a través de la fotosíntesis y regulan la erosión y
la calidad del agua.
A pesar de los beneficios que nos proporcionan los bosques tropicales, la
deforestación es uno de los problemas más importantes con serias consecuencias
económicas y sociales. Otro de los problemas es la fragmentación y degradación
del hábitat, junto con la extracción selectiva de algunas especies. Tan sólo en
2002, sólo el 26% de la cobertura total se encontraba en un buen estado de
conservación.
Es por eso que debemos hacer un manejo sostenible de los bosques para
garantizar su productividad a largo plazo y la conservación de todos los recursos
bióticos y abióticos.