EL 8M DE LAS MUJERES SIN MIEDO
Alberto Abrego
“Necesitamos más mujeres ministras de medio ambiente, lideresas empresariales y presidentas y primeras ministras. Ellas pueden impulsar a los países a afrontar la crisis climática, crear empleos verdes y construir un mundo más justo y sostenible. No podemos salir de la pandemia con el reloj retrocediendo en la igualdad de género. Tenemos que hacerlo ir hacia adelante en los derechos de las mujeres… Ahora es la hora. “
António Guterres. Secretario General de la ONU
“Que tiemble el Estado, los cielos, las calles. Que tiemblen los jueces y los judiciales. Hoy a las mujeres nos quitan la calma. Nos sembraron miedo, nos crecieron alas…”
Fragmento de “Canción sin miedo”, de Vivir Quintana, himno feminista.
Algo tiene que estar mal en el mundo cuando millones demujeres tienen que salir a manifestarse para exigir un alto a la violencia de género y a los feminicidios. En todo el orbe se hicieron presentes los gritos femeninos de protesta contra la desigualdad social, política y económica que han sufrido históricamente.
En el marco del Día Internacional de las Mujeres, este 8 de marzo se multiplicaron los reclamos que deberían ser festejos, recordándole al mundo que sigue habiendo discriminación, desequilibrio político, desprotección familiar y social, indiferencia ante las injusticias y peor aún: siguen matándolas.
Las cifras se acumulan, se transforman en estadísticas y se incrementa el estigma de la violencia incontrolable. Se documentan más de 30 mil mujeres asesinadas en la última década, por lo que sobran razones para la indignación y para la exigencia de soluciones; para demostrar hartazgo contra la impunidad; para exhibir a unas instituciones en las que ya no creen y para recordarles a los gobiernos del mundo que su voz es fuerte.
No puede concebirse una historia de progreso sin las mujeres. En nombre de ellas se han desatado guerras y destruido imperios; han sido musas e inspiración de las más grandes obras artísticas; a la mujer se le ha señalado como el origen de los pecados del mundo; lo cierto es que no se concibe al más grande líder, gobernante, científico, deportista u hombre exitoso sin el apoyo de una fémina.
La lucha de la mujer en la búsqueda de justicia e igualdad de oportunidades ha sido tan larga como difícil, pues es una batalla que debe vencer prejuicios milenarios y prácticas sociales y familiares discriminatorias muy arraigadas. Poco o nulo consuelo representa el recordar que en Occidente, a pesar de una historia llena de limitaciones sociales, como sociedad hemos logradoavances que son considerables respecto a algunas sociedades orientales, donde las mujeres son tratadas prácticamente como seres inexistentes.
Lamentable que en el primer cuarto del Siglo XXI todavía existan personas con criterio de la Edad Media, y peor aún autoridades con indiferencia retrógrada. Debemos reconocer que la mayoría de las familias de nuestra sociedad son fuente inagotable de prejuicios. Los varones que descalifican provienen de familias donde las mujeres son marginadas, y eso se refleja en una sociedad con tintes misóginos, en la que miramos con indiferencia quelas cifras de violencia de género crecen y leemos en las noticias diarias que la trata de blancas, las violaciones, violencia y feminicidios generalmente quedan impunes.
Y nuestras autoridades, en toda la historia, como que no ven, como que no escuchan, como que no sienten, como que no le dan importancia y como que se le resbalan las exigencias; más concentrados en futuras candidaturas, escándalos mediáticos o reyertas sin sentido que en escuchar y atender estas demandas legítimas. Nos falta mucho como sociedad para avanzar, y lograr que todos tengamos un mundo más justo y menos amenazador. Por ello este 8 de marzo hubo pocos festejos y muchos reclamos.
Avanzar en este sentido requiere compromiso honesto de familias, empresas y gobierno. Así cambian los individuos, así cambian los países. Así cambia el mundo. ¡Miedo, jamás!
RÁPIDAS MEXIQUENSES. Al recibir el Pergamino al Mérito de la Mujer Mexiquense “Sor Juana Inés de la Cruz”, por parte de la Benemérita Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística del Estado de México, Mariela Gutiérrez Escalante, Presidenta Municipal de Tecámac, destacó que: “Es tiempo de las mujeres con decisión, vocación y con carácter. No para imponernos por el solo hecho de ser mujeres, sino para hacer valer la razón y demostrar nuestra fuerza para crear, para innovar y dejar nuestra propia marca”. Tras 38 meses de gestión, Mariela Gutiérrezmantiene a Tecámac como uno de los municipios mejor calificados del país en materia de Administración Pública; el reconocimiento es significativo y oportuno, en el marco del Día Internacional de la Mujer y en un contexto de selección de precandidatos para contender por la gubernatura del Estado de México, donde sin duda, la alcaldesa levanta la mano.
, y aunque el avance es muy lento, sabemos que falta mucho para lograr que tengan un mundo más justo y menos amenazador.
Los varones quer descalifican provienen de familias donde las mujeres son marginadas. La familia es fuente inagotable de prejuicios. Debemos cambiar. Sí cambian los individuos, así cambian los países, y así cambia el mundo…
Avanzar en este sentido requiere de un compromiso decidido tanto de las mujeres como de las familias, las empresas y el gobierno.