* Caso Tollocan, entre el error y el excesivo impacto.
* Otra vez una mala estrategia de comunicación puso en jaque un proyecto urbano que quizá es necesario para la movilidad de un centro comercial, pero excesivo en su impacto ambiental.
Alguien no midió las consecuencias y confió en que los reclamos se quedarían en la burbuja de las redes sociales.
Pues no, los inconformes con el derribo de más de 170 árboles por la construcción de dos retornos a desnivel en Paseo Tollocan salieron del Facebook y otras plataformas digitales para mostrar su repudio al proyecto en el lugar de los hechos. Hoy se cumplen siete días de protesta y campamento. Las mesas de diálogo e información oficiales han fracasado. La petición de que la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMex) emita un dictamen sobre la factibilidad de la obra no tendrá mayores alcances, la postura será urbanista y a favor de los retornos viales, pero eso no cambiará el sentido de la protesta ni el fallo político admitido.
Es un hecho que las autoridades estatales y municipales, así como los empresarios de Galerías Toluca, ya abortaron el proyecto de los pasos a desnivel pero no habrá anuncio oficial, la decisión no lo darán a conocer nunca porque sería admitir en público el fracaso. Simplemente Las instituciones recurrirán a la estrategia de desgaste o aburrimiento del movimiento opositor donde -hay que admitir- para la mayoría es una causa cívico-ambiental, para algunos cuantos se trata de un botín político a los que no se les debe dar el triunfo de la resistencia civil. Los puentes -se los puedo asegurar en este momento- no se van a construir en al menos un año. ¿Adivinen por qué?, vienen las elecciones federales del 2018. Mal harían en agrandar un descontento social que tendría impacto político, más cuando los comandos de la oposición en Tollocan están plenamente identificados con un partido político.
CANCIÓN, DICHO O REFRÁN
Esa de «No estaban muertos, andaban de parranda» …
Para quienes decían que Ulises Ramírez Núñez y Oscar Sánchez Juárez estaban acabados tras perder la presidencia estatal del PAN, se les informa que el dúo dinámico está de regreso gracias al ridículo electoral de Josefina Vázquez Mota como candidata a gobernadora.
En su lastre de resultados Vázquez Mota arrastró al presidente nacional panista, Ricardo Anaya y al líder mexiquense, Víctor Hugo Sondón.
Con Rafael Moreno Valle en pleno crecimiento rumbo a la candidatura presidencial de Acción Nacional para el 2018, Ulises y Oscar están más vivos que nunca. Eso, además de los acuerdos por sumar sus canicas al proyecto del priista Alfredo del Mazo pone a los creadores del Grupo Tlalnepantla en vía de recuperación del control panista mexiquense.
