domingo, diciembre 22, 2024
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VISUALIDAD EXPANDIDA- Yuritzi BECERRIL-TINOCO

Yuritzi BECERRIL-TINOCO

LA CIUDAD COMO ARTE

A continuación expongo la propuesta de Jean Luc Nancy “Un arte de la ciudad” del libro “La ciudad a lo lejos”.

1. La ciudad como sujeto de arte
La ciudad responde al arte o a las artes que la han concebido o desplegado.
El arte de la ciudad -genitivo objetivo- es el arte de producir un arte de la ciudad -genitivo subjetivo-, que vuelve artista a la ciudad -talentosa, genial, creadora-, en materia de vivir juntos.
2. El transeúnte actor-espectador
El transeúnte es el personaje de la ciudad. En última instancia su único personaje.
El principio de paso y de movimiento requiere que una traslación continua pueda llevar de un lugar a otro.
En el movimiento de la ciudad todo se aferra y compone un bloque sólido, una proximidad e incluso una promiscuidad compacta que sin embargo está hecha únicamente de distanciamientos.
La ciudad es a la escena del teatro: Una escena cercana y distante donde los actores están presentes y cuyas voces y gestos nos tocan mientras siguen estando inaccesibles para nosotros, fuera del mundo.
Movimiento: acercamiento, distanciamiento, fintas, adelantos, anticipos, retiradas.
Trayectorias: intersecciones, choques, atracciones y repulsiones.
La ciudad es la invención del modo infinito de circulación del sentido.
3. Arte del movimiento, arte de los cuerpos.
Todo en la ciudad se juega en los bordes, las franjas, los márgenes de todas esas entidades definibles como puentes, bordes, pasajes.
Arte de acercamientos furtivos, de pasajes pasajeros, de paseantes insignificantes, de significancias infraleves[noción duchampiana que expresa aquello que no se puede medir, pesar ni descomponer químicamente].
No es arte coreográfico, aunque así parezca cuando se lo aprehende como conjunto desde una vista panorámica y vertical; pero que no lo es cuando se toma parte de él.
Ni coreográfico, ni cinematográfico, ni propiamente teatral, ni menos aún pictórico.
Más cercano a la música y la literatura en cuanto a su resonancia interna e impregnación; el timbre, tono e impulso antes que la composición y la armonía; la atmósfera antes que la narración.
Arte del movimiento, arte de los cuerpos: es un arte de la exposición y de la extensión que constituyen los cuerpos: almas tendidas unas a otras, sujetos que se señalan entre sí, signos de presencias posibles, no certeras, nunca dadas, jamás probadas sin resto.
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