Redacción
La gastronomía mexiquense se caracteriza por sus diversos sabores y aromas, así como por mantener las prácticas artesanales tradicionales. Un ejemplo de esto se observa en la producción de quesos en el pueblo conocido como Polotitlán.
Identificado por sus habitantes como la «Capital del queso», Polotitlán se destaca por ser un importante centro de producción láctea, donde coexisten negocios familiares como Grupo Lácteos Polotitlán (GruLaP), Maxilácteos, Quesos San Nico, y Quesos El Encino, entre otros.
En el proceso de fabricación, el primer paso implica calentar la leche de vaca a una temperatura de 38 a 40 grados Celsius. Posteriormente, se añade el cuajo y se espera a que la consistencia madure, lo que facilita el proceso de escurrimiento durante aproximadamente 24 horas.
Una vez que el producto está seco, en el caso del queso ranchero, se muele y se le añade sal antes de colocarlo en el molde correspondiente.
Para el queso Oaxaca o quesillo, se emplea la misma pasta cuajada, pero se deja reposar únicamente durante dos horas para reducir la acidez de la leche.
Una vez alcanzado el nivel de acidez adecuado, se incorpora agua caliente para iniciar el estiramiento de la pasta, que luego se enfría y se sazona con sal para formar las características tiras de este tipo de queso.
La gama de quesos producidos incluye variedades como el ranchero, Oaxaca, panela, manchego y botanero, además de otros productos como requesón y yogur natural y de frutas.
En el caso de Grupo Lácteos Polotitlán (GruLaP), Jorge Arregui informa que la empresa produce diariamente 500 kilogramos de diversos quesos y opera cinco puntos de venta en Polotitlán y 26 en la Ciudad de México, generando actualmente 42 empleos directos para las familias locales.
GruLaP distribuye sus productos en municipios como Toluca, Lerma, Metepec, Tepotzotlán, Tlalnepantla y Naucalpan, así como en los estados de Jalisco, Querétaro y Sonora.
Los visitantes de este Pueblo con Encanto tienen la oportunidad de participar en recorridos guiados para conocer el proceso de elaboración de los quesos artesanales, los cuales representan una delicia gastronómica mexiquense apreciada en todo el mundo.