Gerardo GARCÍA HERNÁNDEZ
*Se cumplen dos meses y no hay pista
de los dos notificadores que fueron a Tlatlaya.
Pese a que se montó un operativo de seguridad desde el pasado 16 de junio por la desaparición de los dos notificadores del Servicio de Administración Tributaria (SAT) en el municipio de Tlatlaya, el Gobierno del Estado de México admitió que la investigación se encuentra estancada, al continuar sin tener pista alguna sobre su paradero, incluso también se liberó a las personas que habían sido detenidas por el caso, al no comprobar su relación con el incidente.
Al cumplirse este día dos meses, el operativo no ha tenido éxito con todo y que los tres niveles de gobierno desplazaron a elementos del Ejército, La Marina, La Policía Federal (PF), la Procuraduría General de la República (PGR), así como policías estatales y municipales.
En entrevista el secretario General de Gobierno, José Manzur Quiroga reconoció el nulo avance que se ha tenido para dar con los servidores del SAT, ni tampoco cuál es la situación de su integridad física, ya que en dicho periodo no se ha pedido rescate para su liberación.
“No los hemos encontrado es un asunto que ha estado permanentemente haciendo operativos todos los días, desgraciadamente no los hemos encontrado,
“Se analizó su participación (de los detenidos), hasta donde la Procuraduría vio, no tenían nada que ver en el asunto y quedaron en libertad…”.
El encargado de la política interna, Manzur Quiroga no descartó la posibilidad de que los notificadores hayan sido llevados desde un inicio al estado de Guerrero, motivo por el cual argumentó no se ha tenido pista dentro del territorio mexiquense.
Por ello, indicó se ha mantenido el operativo no sólo en la entidad, además se ha estado en contacto permanente con el jefe del SAT, Aristóteles Núñez Sánchez para reportar la situación.
“Yo tengo la impresión de que el mismo día que llegaron a la zona, se los llevaron al estado de Guerrero, pero es una mera impresión Guerrero, Morelos y Estado de México, hemos estado permanentemente”, aseguró.
Apenas el fin de semana, también el SAT reconoció que las autoridades de seguridad y justicia continuaban sin alguna pista de los servidores, aunque se mantenía la esperanza que pudieran ser ubicados con vida.
Mientras tanto, la institución revisa los protocolos de siniestro y de inseguridad, al reconocer que los mismos fallaron para evitar el extravío de los notificadores en Tlatlaya, pero también porque algunas zonas de Sonora, Sinaloa y Tamaulipas continúan siendo de alto riesgo.
Fue el 16 de junio cuando el SAT levantó la denuncia ante la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM) por la desaparición de los dos trabajadores que al momento sólo ha derivado en la ubicación de la camioneta en donde viajaban, hallazgo que se dio entre los límites de la entidad y Guerrero.