- Fernando Flores, el prominente empresario y adelantado aspirante en Metepec.
- “No por mucho madrugar…”, en su cuarto de guerra tienen la brújula extraviada.
- Flores no recuperó la inversión que apostó con Eduardo Capetillo, en Ocoyoacac.
- Morena, de Maurilio Hernández, renunció a sus facultades en el Congreso local.
- Antorcha se cura en salud; dice que defenderá a su dirigente, Aquiles Córdova.
POR: JUAN GABRIEL GONZÁLEZ CRUZ
Mucha atención con lo que se empieza a gestar en Metepec rumbo a las elecciones del 2021. Tal y como sucede a nivel estatal, los panistas o visiblemente azules son los más adelantados.
Ya no es un secreto que el exitoso y multinombrado empresario, Fernando Flores Fernández, ha construido desde ahora un “Cuarto de Guerra” en el que se analiza y ejecuta una estrategia electoral, y en cuya mesa de posibles rivales para la alcaldía tienen ubicados a Alejandro Abad Lara Terrón, hechura de Ricardo Aguilar Castillo; al notario Jorge Ramos Campirán, que no se define si va por Morena o el PES; a la diputada federal “del PRI” Ana Lilia Herrera Anzalzo; y hasta a la actual alcaldesa, Gaby Gamboa, vía reelección. Esto es menos que una verdad a medias.
Al portentoso capitalista le hacen falta asesores que le entiendan más al negocio de la política, porque Ana Lilia efectivamente puede ser su rival, pero de partido; mientras que del lado oficial parece que ni se la espera con el posible enviado de Lerdo 300, considerando que sería uno de los más allegados del primer priista de la entidad.
Metepec es tierra fértil para una nueva alternancia, por lo que su importancia política y económica va más allá de cálculos fáciles e inmediatos. La brújula de Fernando y allegados anda algo desviada. No se les vaya a hacer realidad esa de: “Lo que mal empieza…»
Cría cuervos…
Hablando de los hilos de Fernando Flores, además de la derrota que tuvo en el 2018 con Eduardo Capetillo en Ocoyoacac, al empresario le salió muy rudo el ex Timbiriche, quien se niega a devolver parte la inversión de poco más de 8 millones de pesos que -como padrino- le metió a la precampaña y campaña del galán de la Televisión.
Los documentos que tiene el empresario son suficientes para tirar a Capetillo en la siguiente elección, sobre todo porque ya se sabe que el esposo de la bella Biby Gaytán anda planeando regresar a la arena política y está tocando puertas como la del Partido Verde, que al parecer se reservará el derecho de admisión. Según dicen los del Tucán: “hay que ser puercos, pero no tan trompudos”.
Ese Capetillo quiere aplicar en la política aquello de la actuación, que le permite estar en una, otra y en la siguiente telenovela.
CANCIÓN, DICHO O REFRÁN
Desde la madre patria…
Por cierto… Además de Santiago Nieto, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda, ¿quién más anda interesado en indagar varios negocios México-España, vía embajada de la nación ibérico en nuestro país, con salpicadera en el Estado de México? Acuérdense que la semana pasada fue detenido en la “madre patria” el ex director de PEMEX, Emilio Lozoya, a quien en ese país trataban como rey en el sexenio pasado… digo, también Lozoya era cercano al poder y prominente empresario.
Esa de Javier Solís: “Payaso”…
Chistoso resultó el presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso local y coordinador de los diputados de Morena, Maurilio Hernández González, quien le pide al gobernador Alfredo del Mazo ser sensible con las manifestaciones en contra del “Tarifazo”; literal, un nuevo en infructuoso llamado a misa que puede terminar en “karma”. A paso perdido Maurilio trata de redireccionar la protesta social al origen del problema, sin aceptar que la Legislatura ya tiene encima los ojos de la dolida ciudadanía, no por lo que se hizo, sino por lo que se dejó de hacer. Asunto sencillo: la mayoría del Congreso pide sensibilidad al Ejecutivo, pero los usuarios del transporte le piden a los morenistas no renunciar a sus facultades para detener el aumento al pasaje o ya siquiera para reformar la ley que impida en lo sucesivo albazos en los ajustes tarifarios. Por supuesto que los diputados no harán ni una ni otra cosa porque no quieren echarse encima a los transportistas, los costos políticos serían desastrosos para su futuro electoral inmediato. Esta es la razón que alienta la tibieza de Maurilio y compañía.
El beso del diablo…
En este momento una reunión, foto y hasta un saludo con los impresentables dirigentes del “Movimiento Antorchista” es algo así como el “beso del diablo”; bueno, si tomamos en cuenta que la política es como el infierno de la ciudadanía sólo resta decir: “entre diablos te veas o que Diosito nos ampare”. Creo que hasta el más ingenuo de los políticos evitará presumir en los siguientes días su sangre, amistad y hasta el más mínimo acercamiento con los “antorchos”, sobre todo si se cumple la ventilada advertencia del gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, en el sentido de la detención con fines penales, de Aquiles Córdova, máximo jerarca del Movimiento Antorchista. Pobres de aquellos ilusos que han visto en Antorcha una plataforma de promoción electoral.