Por Alelhi Rodríguez
Casas de campaña improvisadas con tarimas, cartones y plásticos sirven de resguardo para varias familias, mientras esperan el diagnóstico de sus pacientes, que permanecen en el Hospital General «Dr. Nicolás San Juan», en la zona norte de Toluca.
Ante las bajas temperaturas y lluvias registradas en el Valle de Toluca, y gran parte del país, el camellón de la calle Doctor Nicolás San Juan ha funcionado como un refugio para sobrellevar las inclemencias del tiempo.
Son decenas de historias las que habitan en estos campamentos, poco dignos para la estadía al exterior de un nosocomio, como la de María González Hernández quien, sentada sobre algunos tabiques que adaptó como bancos, se come un taco ofrecido por altruistas, mientras la vocean para conocer el estado de salud de su hijo.
Madre de familia que le resta importancia a las condiciones que ha enfrentado en los últimos días. «No importa, por lo menos está uno aquí afuera. Como ayer, estuvo llueve y llueve y nosotros aquí sentados, esperando algún aliento de vida, esperando a que nos llamen y que nos den una buena noticia», comentó.
Basura y hasta fauna nociva es parte del escenario frente a este hospital, que no cuenta con un área de espera para los familiares de los enfermos. «Pasamos hambre, frío. Por ejemplo ayer, estábamos aquí y nos mojamos, es muy doloroso estar aquí así», son frases de los familiares.
Eulalia Ortiz es otra historia, quien lleva casi 10 días esperando a que su nuera se recupere, después de un parto complicado. «No hay dónde quedarnos; nos tenemos que quedar en la calle. Ayer y antier que estuvo lloviendo así estuvimos aquí, con el agua. Aquí comemos, aquí los familiares nos vienen a dejar un taco, y pues aquí nos sentamos a comer en la calle».
Aseguran que estas circunstancias ya las han vivido en algunas otras ocasiones, “cuando yo me he enfermado, o mis hijos o mi esposo, hemos venido siempre aquí y siempre está así. Ahora que se embarazó mi nuera regresé y está igual, no ha cambiado», comentó.
Piden consideración, así como apoyo, pues además de la preocupación que los aqueja se suma el pernoctar a las afueras del hospital en plena emergencia sanitaria por Covid-19.