Por Lilia González
Ante la dificultad financiera del Ayuntamiento de Toluca para solventar el pago de nómina a sus trabajadores, el presidente de la Junta de Coordinación Política (JUCOPO) de la LX Legislatura, Maurilio Hernández González, ratificó que sirvieron como mediadores para consolidar acuerdos con el Gobierno del Estado de México, conviniendo no retener al gobierno municipal participaciones por conceptos del Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios (ISSEMyM) y de la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM).
“No es que el Gobierno del Estado tenga que entrar a salvar a los municipios, no; no es porque el Gobierno se haya comprometido con el municipio a no retenerle participaciones, porque por ley se tiene que retener para el ISSEMyM o para CAEM, pero el planteamiento que se hace es que se facilite a cuenta de las mismas participaciones el recurso que le permita cumplir con uno de los compromisos fundamentales, que es precisamente el salario de los trabajadores”, comentó.
Entre los acuerdos que se lograron, detalló, fue que entre este 22 y el 23 de julio se comenzará a dispersar la primera quincena de julio que se adeuda y la segunda quincena se pagará en tiempo y forma; así como el que se le diera la oportunidad al Ayuntamiento de poder cobrar a sus acreedores lo que adeudan.
Y es que, comentó, tan solo la Universidad Autónoma del Estado de México adeuda al Ayuntamiento más de 400 millones por asuntos del agua, siendo una deuda histórica que no ha sido solventada.
“El acuerdo es que no tuvieran qué retenerles en caso del ISSEMyM o de CAEM; ya después se habrá de renegociar y, por otro lado, también darle oportunidad al Ayuntamiento para que pueda cobrar a sus acreedores”, señaló.
Específicamente en el caso de Toluca, la administración de Juan Rodolfo Sánchez Gómez asegura que recibió el Ayuntamiento con un saldo negativo por adeudos a proveedores por cerca de 1 mil millones de pesos que le heredaron tres anteriores administraciones, la de María Elena Barrera Tapia, la de Martha Hilda González Calderón y la de su antecesor Fernando Zamora.