REDACCIÓN
Debido a que en temporada decembrina las lesiones por quemaduras se incrementan hasta en 30 por ciento, en promedio, la Secretaría de Salud del Estado de México, exhorta a tomar las medidas de prevención necesarias a fin de disminuir el riesgo de presentar este tipo de percances.
La dependencia informa que la población más afectada es la infantil, ya que aproximadamente 70 por ciento de los niños que se queman, principalmente menores de siete años de edad, deben sus heridas al contacto con líquidos calientes y, en menor porcentaje, al fuego.
Tan sólo durante la temporada decembrina de 2017, la Unidad de Quemados del Hospital General “Dr. Nicolás San Juan” atendió a 20 pequeños con quemaduras, mientras que, en diciembre de este año, suman nueve, de los cuales, tres reportan lesiones relacionadas con pirotecnia.
Las abrasiones de segundo y tercer grado inevitablemente dejarán una cicatriz que afectará psicológicamente a los niños e incluso -dependiendo de la gravedad- pueden dejar una secuela funcional en extremidades, por lo que además de rehabilitación física, el paciente puede requerir cirugías más adelante que le ayuden a recuperar la funcionalidad de la parte afectada.
La Secretaría de Salud estatal recomienda mantener alejados a los niños de los lugares donde se cocina o de objetos y líquidos calientes, colocar las ollas en las hornillas traseras de la estufa, así como evitar que los menores manipulen fuegos artificiales, en caso contrario, deberán ser supervisados por un adulto en todo momento.
