28 muertos, tres heridos y al menor 20 reos fugados fue el saldo de un motín al interior del penal de Acapulco.
De acuerdo con autoridades de Guerrero, los hechos se registraron cerca de las 5:00 horas de este jueves cuando custodios reportaron detonaciones de arma de fuego al interior de la cárcel.
El director del centro penitenciario, Miguel Ángel Gómez Garduño, quien fue destituido tras los hechos violentos, precisó que la agresión armada se registró en el módulo denominado “de máxima seguridad”, donde se alojan internos acusados de formar parte de la delincuencia organizada.
Tras las detonaciones de arma de fuego, alrededor de 500 internos salieron de sus celdas, y en principio los custodios de una torre de vigilancia reportaron cinco internos ejecutados y decapitados en el acceso principal del penal, refieren los informes consultados por Apro.
Los reportes refieren que los 28 cuerpos fueron encontrados en diferentes puntos como el corredor del módulo de seguridad (MS), ubicado en el bloque 1, así como en el exterior de la cocina y al interior de la misma.
Asimismo, cuerpos quedaron tendidos en el patio del bloque 3 y uno más en el área de visitas conyugales. Todas las víctimas presentaban signos de tortura, impactos de bala y al menos nueve de ellos fueron decapitados.
De acuerdo con imágenes aéreas difundidas por el gobierno de Héctor Astudillo Flores, en ellas se observa a cinco hombres decapitados en la entrada principal de la cárcel; además, sobre las víctimas dejaron escritos mensajes en cartulinas.
En otro punto del penal se observa el cuerpo de otra persona más abatida sobre una plancha de concreto y una imagen más muestra una decena de cuerpos apilados sobre un área del penal.
Además, trascendió que al menos una veintena de reos se fugaron durante la matanza y aún no han sido localizados.
El gobierno del priista Héctor Astudillo Flores confirmó que la cifra oficial de la masacre al interior del penal de Acapulco es de 28 muertos y tres lesionados producto de una confrontación entre grupos antagónicos que se disputan el control de la cárcel, considerada como el centro de operaciones del Cártel Independiente de Acapulco (Cida).
En tanto el vocero de Seguridad en la entidad, Roberto Álvarez Heredia, informó este hecho luego de que las autoridades estatales pretendieron minimizar la matanza argumentando que se había tratado de una riña y que el saldo era de sólo cinco muertos y un herido.
El penal de Las Cruces, donde están recluidos más de dos mil personas, es considerado como una plaza del narcotráfico dentro del mismo puerto de Acapulco, espacio que se disputan las pandillas locales.
Durante el día, familiares de internos se congregaron afuera del penal que permanece cercado por agentes federales y estatales, con el fin de exigir información a las autoridades sobre la identidad de las víctimas.
Cuando funcionarios estatales dieron a conocer la lista con los nombres de los 28 internos asesinados, los familiares en su mayoría mujeres rompieron en llanto y crisis nerviosas ante la tragedia.