POR Isabel Blancas
El sector de comercio y servicios se encuentra preocupado por la posibilidad de que se pierda competitividad, productividad y sobre todo empleo debido al incremento de algunos insumos como la energía eléctrica.
La política energética en México empezó a tener una reacción a la próxima apertura de mercados y se registraron aumentos derivados de la consideración de oferta y demanda, además de los costos de generación de energía eléctrica.
“Anteriormente teníamos una oferta reguladas y se acabó pero actualmente se considera el costo de la producción y el traslado de energía, lo que trajo incrementos para el sector comercio y servicios de entre 15 y 65 por ciento”.
Así lo dijo el presidente de la Cámara Nacional de Comercio Del Valle de Toluca, Juan Felipe Chemor, quien dijo que tener un 15 por ciento de incremento es grave pero 65, deja en desventaja y desprotegidos a varios pequeños negocios.
Con esto, dijo quienes corren mayores riesgos de cerrar o enfrentar graves problemas de sobrevivencia son los pequeños negocios que son la mayor parte de las unidades económicas.
Asimismo y derivado de las diversas pláticas que han tenido con autoridades se determinó que esta tarifa tendrá que reducirse de manera paulatina por lo que durante estos últimos meses esperan una disminución.
“Para 2019 se esperan condiciones diferentes, un nuevo cálculo a y factores diferentes para el cobro de energía y aunque se esperan incrementos ya no tan gravosos como los que estamos viendo”.
