Científicos alertaron que uno de los mayores icebergs de que se tiene registro se ha desprendido de la Antártida, creando un peligro extra para los barcos que navegan en torno al continente.
De acuerdo con la agencia de noticias internacional Reuters, el iceberg de un billón de toneladas y 5 mil 800 kilómetros cuadrados se desprendió del segmento Larsen C en algún momento entre el 10 y el 12 de julio, dijeron los científicos de la Universidad de Swansea y la British Antarctic Survey.
El iceberg llevaba meses a punto de desprenderse y, durante el invierno antártico, los científicos siguieron su situación usando satélites de la Agencia Espacial Europea.
«El iceberg es uno de los mayores registrados y su progreso futuro es difícil de predecir», dijo Adrian Luckman, profesor de la Universidad de Swansea y primer investigador del Proyecto MIDAS, que ha seguido la plataforma de hielo durante años.
«Puede seguir siendo de una pieza pero es más probable que se desintegre en fragmentos. Parte del hielo puede permanecer en la zona durante décadas, mientras que otras partes del iceberg pueden ir a la deriva hacia el norte, hacia aguas más cálidas», añadió.
El hielo supondrá más riesgo para los barcos. La península está fuera de importantes rutas comerciales pero es de los principales destinos para los cruceros que visitan Sudamérica.
En 2009, más de 150 pasajeros y tripulantes fueron evacuados del MTV Explorer, que se hundió tras chocar con un iceberg en la península antártica.
El iceberg, que probablemente se llamará A68, estaba ya flotando antes de que se desprendiera, así que no habrá impacto inmediato en el nivel del mar, pero su desprendimiento ha dejado el segmento Larsen C reducido en más de 12 por ciento.
Las zonas Larsen A y B, situadas más al norte de la península, colapsaron en 1995 y 2002, respectivamente.
«Esto derivó en la dramática aceleración de los glaciares que había detrás, con mayores volúmenes de hielo entrando en el océano y contribuyendo a la subida del nivel de los océanos», dijo David Vaughan, experto en glaciares y director de ciencia de British Antarctic Survey.
«Si Larsen C empieza ahora a reducirse significativamente y finalmente colapsa, habrá otra contribución a la subida del nivel de los océanos», añadió.
Los grandes icebergs se desprenden de la Antártida de forma natural, y los científicos no están vinculando la situación actual con el cambio climático generado por el hombre. El hielo, sin embargo, es una parte de la península antártica que se ha calentado rápido en las últimas décadas.
«En los meses y años posteriores, la capa de hielo podría volver a crecer gradualmente o sufrir episodios de más reducción, lo que puede llevar finalmente al colapso, las opiniones de la comunidad científica están divididas», dijo Luckman.
«Nuestros modelos dicen que será menos estable, pero cualquier colapso futuro sigue estando a años o décadas de distancia», añadió.