Redacción
Ana Peleteiro ha sido blanco de una ola de insultos racistas en redes sociales, desencadenada por un vídeo en el que lucía la equipación de la Selección Española para los Juegos Olímpicos y expresaba su opinión sobre el nuevo color del uniforme. La atleta gallega, inicialmente crítica con el cambio del rojo al naranja en los nuevos uniformes, se encontró con una reacción desproporcionada y llena de comentarios xenófobos.
A pesar de haber cambiado de opinión y haber mostrado su apoyo a la vestimenta nacional, Ana sigue recibiendo mensajes discriminatorios. A través de sus redes sociales, ha denunciado públicamente esta situación, compartiendo algunos de los mensajes de odio y desprecio que ha estado recibiendo.
Aunque ha bloqueado numerosas cuentas, los insultos persisten, mostrando la crudeza del racismo aún presente en las plataformas digitales.
A escasos días del inicio del Campeonato Europeo de Roma, donde participará, Ana Peleteiro ha reiterado su indignación y frustración ante esta situación, subrayando la impunidad con la que se emiten este tipo de comentarios en las redes sociales. A pesar de ello, se ha mostrado fuerte y orgullosa de su identidad y de representar a España.
La ministra de Educación, Formación Profesional y Deportes, Pilar Alegría, ha expresado su apoyo a Ana Peleteiro, condenando los ataques racistas y reafirmando el orgullo nacional que representa la atleta. A través de sus redes sociales, la ministra ha enviado un mensaje claro de solidaridad y aliento a Peleteiro, asegurando que la intolerancia nunca quebrará su fuerza.
José Manuel Rodríguez Uribes, presidente del Consejo Superior de Deportes, también ha salido en defensa de Ana Peleteiro, manifestando su apoyo y destacando la importancia de los éxitos deportivos para reafirmar la identidad nacional. Uribes ha prometido luchar contra el racismo y el odio, asegurando que los logros de los deportistas deberían unir a todos los españoles.
En medio de esta polémica, Ana Peleteiro se prepara para competir en el Campeonato Europeo de Roma, demostrando que, a pesar de las adversidades, su determinación y fuerza siguen intactas.