Por Alelhi Rodríguez
A 32 días de recibir la primera dosis, los adultos mayores de Tenancingo acudieron a la segunda aplicación de vacuna contra COVID-19. Es el caso de Patricia Irene Flores Ramírez, de 60 años de edad, y de su esposo Mauro Leonardo Segura Hernández, de 65 años, quienes reforzaron la seguridad que ya tenían con el inmunizante en sus organismos, lo que pronto los hará retomar sus actividades laborales.
Flores Ramírez cuenta que este sábado asistieron a la Deportiva «El Salto», aproximadamente a las 8 de la mañana se formaron y a las 10 salieron del módulo de vacunación.
«Esta vez, lo único que pasó es que se moreteó mi brazo, pero nada más, la señorita que me colocó la vacuna me dijo que pusiera fomentos de sal, de agua caliente con sal y así lo hice y todo bien, a mi esposo nada, él, todo bien», platicó.
La vacuna completa significa un alivio para la familia Segura Flores que, asevera, con esto podrán regresar a su negocio sin hacer a un lado los cuidados, pero ya con la certeza de estar bien protegidos con el activo contra el virus SARS CoV-2.
«En menos de un mes esperamos incorporarnos a nuestro trabajo que tenemos parado desde hace más de un año, tenemos un salón y jardín de fiestas, no habíamos tenido eventos, hemos rechazado bastantes por lo mismo del COVID-19, pero, con esto, creemos que vamos a estar protegidos, obvio, realizando la sana distancia, cuidarnos con el gel, seguir con nuestro cubrebocas, pero vamos a estar un poco protegidos», apuntó la señora Patricia.
La también maestra jubilada comentó que este año de pandemia significó grandes pérdidas para su negocio, «con la jubilación, gracias a Dios, con eso nos mantuvimos tranquilos económicamente, no del todo, pero pudimos, ahora ya en mayo, junio, esperemos incorporarnos, y meter publicidad de apertura porque perdimos muchos clientes», contó.
