Cristian Campuzano calificó la realización del Consejo Estatal como “grosero” y “simulador”, ante ello, militantes del Sol Azteca le dieron la espalda.
Por Lilia González
Con el respaldo de las dos terceras partes del Consejo Estatal del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Agustín Barrera Soriano fue avalado como el sucesor de Cristian Campuzano, para ser el nuevo dirigente del partido en el Estado de México.
Con la asistencia de 175 de 194 consejeros, se realizó el Cuarto Consejo Estatal Extraordinario, en donde se desarrollaron dos asambleas del Consejo Estatal, una para ratificar la salida de Cristian Campuzano de la dirección estatal, y la otra para nombrar al nuevo responsable de dirigir los destinos del PRD en la entidad.
Siendo impulsado por las corrientes Vanguardia Progresista, encabezada por el diputado local Omar Ortega, y por Alternativa Democrática Nacional (ADN), que dirige el exsenador Héctor Bautista, se nombró a Agustín Barrera Soriano como el nuevo dirigente.
Al tomar la palabra, Barrera Soriano destacó que, de cara a los próximos comicios en la entidad para renovar la gubernatura, el PRD no se puede dar el lujo de cometer un error más, por lo que, dijo, están obligados a definir a la brevedad qué decisión tomarán respecto a las alianzas políticas o si participarán con candidato propio.
Ante ello, hizo un llamado a todas las fuerzas que integran el PRD para dar un paso hacia adelante y dejar de lado los conflictos internos, con la finalidad de llegar fortalecidos a la elección de gobernador.
“Necesitamos definir ya si vamos solos que, desde mi perspectiva, es lo más correcto, pero es una decisión que aquí debemos de tomar entre todos. Candidato o candidata tenemos. Para el PRD no hay mañana, del resultado del 23 dependerá nuestro futuro inmediato; sin 23 no habrá 24, la próxima elección de gobernador es la madre de todas las batallas para PRD”, sostuvo.
Al asistir al Consejo Estatal, Cristian Campuzano calificó el ejercicio como “grosero” y “simulador” pues, dijo, se intenta imponer de nueva cuenta una sola visión, por encima del interés común y partidario.
A la par, algunos militantes decidieron darle la espalda mientras emitía su discurso, pues en este aseguró que en la reunión se encontraban presentes algunos liderazgos que, si bien se habían formado en el PRD, también han apoyado a otras fuerzas políticas, asistiendo al Consejo meramente por conveniencia.
“A quienes hoy me dan la espalda, espero que el día de mañana no les haga falta el acompañamiento y la solidaridad institucional del partido; aquí no hay buenos, aquí se discute; aquí no hay posiciones únicas, aquí se debate; aquí no hay verdades absolutas. Debemos acabar con la simulación, se está o no se está, se es o no se es”, exclamó.
