Por Lilia González
Indicando que uno de cada seis adultos mayores de 60 años han sufrido algún tipo de abuso en entornos comunitarios, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, los legisladores mexiquenses del Revolucionario Institucional han propuesto erradicar el despojo de sus bienes por parte de familiares, siendo este uno de los abusos más frecuentes del que son víctimas.
La diputada Iveth Bernal Casique señaló que en ocasiones y con la finalidad de evitar cargas excesivas como las que se originan con los testamentos o contratos de compra-venta, las personas adultas mayores optan por la realización de contratos de donación en favor de sus familiares o conocidos, por implicar una menor carga económica; sin embargo, dijo, este tipo de contratos los pueden ubicar en estado de indefensión, pues una vez concretado, sus familiares pueden actuar de mala fe, despojándolos de los bienes y dejándolos en estado de abandono.
Señaló que si bien, el Código Civil del Estado de México da pauta en su artículo 7.643 para poder hacer valer la causa de revocación de la donación por ingratitud, ésta prescribe en un año contado desde que tuvo conocimiento del hecho, el donador, lo que dijo, es muy poco tiempo para hacer valer esta causa de cancelación de lo donado.
“Bajo este contexto la presente iniciativa propone que cuando el donante sea un adulto mayor, es decir, una persona de 60 años o más, la escritura pública deberá contener una cláusula de usufructo vitalicio sobre el bien o bienes donados, que proteja a nuestros adultos mayores y puedan permanecer en los inmuebles si así lo desean hasta su muerte”, explicó.
En resumen, la propuesta se engloba a que las personas de la tercera edad puedan seguir disfrutando del bien que dieron en donación, aunque ya no sean los propietarios, lo que los protegerá jurídicamente, en caso de que alguno de los donatarios quisiera desalojarlos.
