Redacción
Las autoridades iraquíes llevaron a cabo una operación conjunta con fuerzas de la coalición internacional para eliminar a un alto líder del grupo Estado Islámico. La intervención ocurrió en la provincia de Anbar, al oeste de Irak, y tuvo como objetivo a Abdallah Maki Mosleh al-Rifai, conocido como «Abu Khadija». Este individuo era considerado una de las figuras más influyentes dentro de la organización extremista.
El gobierno iraquí destacó la importancia de esta acción en el combate contra el terrorismo, reafirmando su compromiso de erradicar la presencia de grupos radicales en el país. Según fuentes oficiales, la eliminación de Abu Khadija representa un golpe significativo contra la estructura de liderazgo de Estado Islámico en Irak y Siria.
Fuentes de seguridad informaron que la operación se ejecutó mediante un ataque aéreo y que la confirmación del resultado se obtuvo horas después. No se han revelado detalles adicionales por motivos de seguridad, pero se ha señalado que esta acción forma parte de una estrategia más amplia para desmantelar redes extremistas.
Este acontecimiento coincidió con la visita de un alto funcionario diplomático sirio a Irak. Durante el encuentro, ambos gobiernos ratificaron su cooperación en materia de seguridad con el fin de enfrentar la amenaza persistente de Estado Islámico y evitar su reaparición en la región.
Las autoridades iraquíes han reiterado que continuarán ejecutando operaciones de este tipo en coordinación con aliados internacionales. El objetivo es garantizar la estabilidad y prevenir la reorganización de grupos extremistas que puedan representar un riesgo para la seguridad regional e internacional.
