POR Yuritzi BECERRIL
Las relaciones e interacciones en el espacio (territorio, cuerpo, campo sensorial) están estrechamente relacionadas con las formas de lenguaje. El lenguaje determina nuestra forma de percepción a partir de las categorías que usamos para describir el mundo.
La tecnología digital como una forma de representación del mundo cambió la forma de relacionarnos, en este año 2020 se ha hecho evidente que la organización de las relaciones a través de herramientas digitales ha borrado la separación entre mundo físico y mundo digital. Hoy podría ser más fácil entender que lo digital no es solamente una categoría que describe objetos o tecnologías sino una forma de relacionarnos con el mundo que implica una transformación (o expansión) de nuestro espectro de percepción.
¿Qué pasa en el campo de la producción artística? Octavio Gutiérrez, artista sonoro y profesor de Arte Digital de la Facultad de Artes de la Universidad Autónoma del Estado de México, se pregunta si podemos reducir lo digital a una etiqueta descriptiva, esto al preguntarle sobre la relación entre su práctica como artista sonoro en el campo del arte digital. El mundo está muy transformado, ahora es innegable que vivimos en una era digital. Entender esto implica situarnos en un pensamiento digital.
En la forma más simple el lenguaje digital es una cadena binaria formada por ceros y unos, de acuerdo con el artista sonoro, técnicamente nos referimos a un modelo de representación de información que llevamos relacionando desde hace más de 70 años con objetos técnicos; pero ahora entendemos que esos objetos técnicos son un dispositivo de nuestro discurso y en tanto dispositivo, lo digital es inmensamente más complejo que la representación de la información a partir de un código máquina, porque no es solo eso, y en el arte es más clara esta complejidad.
La experimentación artística de Octavio Gutiérrez en el campo del arte digital está relacionada con el sonido: piezas audiovisuales, programación, machine learning. En general se interesa por explorar las posibilidades artísticas del sonido más allá del soporte físico que definiría más bien a lo musical, en cambio, el trabajo sonoro de Octavio Gutiérrez se aproxima a una categoría más espacial que engloba una serie de prácticas artísticas relacionadas con el sonido, por ejemplo el live coding o la música techno house que es parte de su inspiración.
La información, nos cuenta @vjtavo, es el elemento básico que constituye al Universo. Somos sistemas de información. En tanto seres vivos, habitantes de este Universo compuesto a base de partículas de información somos agentes de sistemas que vamos hacia la nada. Así que bajo esa forma de entender la realidad, la información podría ser el elemento básico del Universo, más allá de la materia, algo que nos acerca a las teorías de la física cuántica en donde la materia no es más que un conjunto de resonancias. En términos musicales seríamos como un conjunto ampliado de silencios y sonidos, siguiendo la definición musical de John Cage, partículas que en la mínima vibración sonaríamos como un Beat.
En este sentido podemos encontrar una relación entre sistemas digitales y sistemas biológicos porque la vida está hecha de partículas mínimas que se convierten en sistemas complejos a partir de sus trayectorias, relaciones e interacciones. Por otro lado, nos cuenta Octavio, el diseño de la informática tiene un lenguaje similar al de la física y la matemática, por eso podemos representarla de manera virtual. La idea, es que llevamos muchos años interactuando con entornos digitales, por ejemplo, estamos acostumbrados a escuchar música que ha pasado por procesos digitales sin hacer esta distinción. Es decir, sin detenernos a pensar que lo que escuchamos es la traducción de un código o lenguaje computacional comprensible gracias a una interfaz amigable al lenguaje humano.
Así como el mundo fue plano en algún momento y luego fue redondo, hoy el mundo es digital, sugiere el profesor de Arte. Esta afirmación conlleva repercusiones políticas, ya que en un mundo donde todo está programado, no conocer ese lenguaje es ser un objeto dentro de esa programación. En el arte implica que si tú quieres generar tu propio contenido tienes que dominar ese lenguaje, tienes que aprender a hackear tu propio mundo. Es decir que, poder crear en este tiempo implica manejar este lenguaje. Un artista habla de su tiempo y de su mundo. Por lo tanto la obra de arte tiene que conversar con un tiempo que ha devenido digital.