- Literal… Subir al Nevado de Toluca se ha convertido un deporte de alto riesgo.
- Ayuntamiento de Zinacantepec calladito frente a lo ocurrido en el Xinantécatl.
- Comisariados ejidales administran a sus anchas el inseguro Parque Nacional.
- En Ocuilan, familia gobernante mete el corazón en la nómina y en contratos.
Y a todo esto del secuestro y liberación del actor, Alejandro Sandí y del ciudadano francés, Frederic Michel, ocurrido a inicios de semana en las inmediaciones del Nevado de Toluca… ¿Qué ha dicho o hecho el ayuntamiento de Zinacantepec que tiene bajo su mando el alcalde de Morena, Gerardo Nava?
Miren que la autoridad municipal tiene mucho qué responder a esto que no es nuevo y que viene ocurriendo desde hace varios meses, pero que se agudizó en los últimos meses. El robo de vehículos a mano armada o por falta de vigilancia, principalmente camionetas “todo terreno” o de lujo, son el pan nuestro de cada día en la parte alta de Xinantécatl; sólo que esta vez el atraco tuvo relevancia porque se trató de una figura pública del área del entretenimiento y de un extranjero, el resto de los hurtos han pasado de noche.
Pero aquí, en el “Caso Nevado de Toluca” confluyen distintas responsabilidades y demasiadas omisiones. Se trata de un “Parque Nacional” administrado totalmente por ejidatarios, pero donde la seguridad debe corresponder al ayuntamiento, al gobierno del estado y a la Guardia Nacional… ¿cuál de estas autoridades asume su obligación a plenitud?
Lo cierto es que por desinterés u omisión este parque natural se ha convertido en el botín de los ejidatarios. Alrededor del Nevado de Toluca hay dos ejidos claves: el de San Juan de las Huertas y el de Santa María del Monte, donde –por cierto- Valentín Nava, hermano del alcalde de Zinacantepec, Gerardo Nava, es el comisariado ejidal.
El Parque de los Venados, que es la cúspide y donde se encuentra lo más atractivo del volcán es manejado por San Juan de las Huertas, cuyos ejidatarios han hecho toda una mina de oro en esta reserva, pues además de cobrar todo tipo de derechos para acceder y ascender a las lagunas también tienen a su cargo los puestos de comidas y bebidas.
Pero lo que más les deja ingresos es el asunto del transporte. Todos los visitantes tienen de dos sopas: o “ingresan con sus camionetas y pagan peaje, con el riesgo de ser asaltados o secuestrados” o “dejan sus unidades en el estacionamiento -con su cuota respectiva pero sin la garantía de encontrarlo a su regreso- para después abordar las camionetas propiedad de los ejidatarios en subida y bajada, también con una cantidad económica de por medio. Todo un negociazo sin las garantías de seguridad.
No se necesita ser un investigador de FBI para deducir que los responsables del secuestro de Sandí y Michel pertenecen a las clásicas “banditas” que operan en toda la región alta de Zinacantepec; sólo veamos cuanto pidieron de rescate: 30 mil pesos. Y así como el del domingo varios robos y secuestros exprés, todos al amparo, omisión, desconocimiento o permisión de alguien que perfectamente podría saber quiénes son los delincuentes… Ahora sí que subir al Nevado de Toluca se ha convertido en un deporte de alto riesgo, lástima porque lo sucedido el domingo impactará en la afluencia de visitantes.
CANCIÓN, DICHO O REFRÁN
Ya chambee señora…
En estos la recién nombrada Secretaria de Turismo del Estado de México, Evelyn Osorno, debería estar más preocupada por coordinarse con las autoridades de seguridad y justicia de la entidad, de municipios y de la federación para proteger a los visitantes y la importante derrama económica que esta actividad representa, en lugar de andar posando para la foto prácticamente todos los días, desde que llegó. Algunas reuniones las ha hecho con sectores importantes, pero otras son verdaderamente de relleno que no le abonan nada al sector turístico. Valdría la pena decirle a Osornio que el turismo no está en las redes sociales, sino en los pueblos mágicos, en los pueblos con encanto y en las zonas ecológicas como el Nevado de Toluca, donde recientemente se presentó el desaguisado con secuestro de dos turistas. Una visita al Xinantécatl por parte de Evelyn le daría más confianza a los paseantes, que seguramente están asustados con lo sucedido el pasado domingo y preocupados de ver qué la encargada del área de turismo mexiquense está “metidota todo el tiempo” en el Facebook.
Leña del árbol caído…
En el ayuntamiento de Ocuilan la familia gobernante continúa metiendo el corazón en la nómina y en los contratos. Basta ver lo que está sucediendo con el “Festival Cultural por la Vida”, cuyo objetivo teóricos es recaudar fondos para programas y proyectos a favor de las comunidades que se han visto devastadas por la tala de árboles; un cartel de primera, con artistas de renombre y con un costo de recuperación de 600 pesos… hasta aquí todo va bien. Pero hace unos días cuando se anunció dicho festival aparecieron en la foto “muy arregladitos” José Emmanuel Cruz Núñez, supuesto representante de “la sociedad civil” y Vanessa Linares Zetina, Presidenta del Sistema Municipal del DIF Ocuilan. La imagen no tendría nada de especial si no fuera porque Emmanuel –uno de los organizadores- y Vanessa son pareja sentimental con residencia en un exclusivo departamento de Metepec. Emmanuel Cruz -ex regidor priista de Lerma- y Vanessa Linares (quien por cierto anda estrenando rostro), no escatiman en presumir sus amoríos, sus lujos y sus excentricidades. Pobre Ocuilan, la tala de árboles es un problema real del que se están colgando el acalde, Félix Linares y su familia, que continúan en los excesos de poder.