POR Alfonso FAURE MEZA
@alfonsofaure
Según datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la CONAPRA, en México hay alrededor de 20mil muertes por accidentes vehiculares cada año, ocupando el tercer lugar en América Latina. La mayoría de estas fatalidades se dan por conducir bajo los efectos del alcohol, excesos de velocidad y distracciones en general. Las primeras dos causas son por la negligencia de los mexicanos a respetar las leyes y a la autoridad; ya que, fuera del “torito” es extraño encontrar estados y ciudades que realmente hagan cumplir las reglas de tránsito.
Para poder revertir esta situación, creo que podemos observar las mejores prácticas que tienen otros países y poder aprender de ellos. En las autopistas alemanas, o Autobahn, no hay límite de velocidad, y vaya que las marcas alemanas le sacan jugo a esto para mostrar el músculo y poder de sus últimos modelos, Es posible ir en un Mercedes Benz SLK 350 a 220km/hr y que te rebase un Porsche 911 sin siquiera respingar. Sin embargo, en las zonas y lugares donde sí hay un límite de velocidad, en general éste es respetado y no vi a ningún automovilista violento queriendo rebasar a todo mundo echando las luces y manejando a centímetros de tu defensa trasera. Y esto se nota, con una tasa de “solo” 3,500 fallecimientos al año por accidentes viales, hay una gran diferencia con México.
Esto se debe a que allá en Alemania, y en genera en toda la Unión Europea, la población sabe manejar correctamente ya que el sistema de licencias y el reglamento de tránsito es más robusto y cuidadoso. Y cuando digo manejar correctamente no me refiero a saber qué pedal es el del freno y qué posición debe de tener la palanca de trasmisión para avanzar; me refiero a que allá la gente sabe las normas básicas (y no tan básicas) de tránsito, cómo rebasar en autopista, dónde te puedes estacionar, cuál es la función de la luz direccional y del claxon, etc.
Por supuesto que también hay personas que manejan mal, que deben de pagar por sus infracciones y pueden perder hasta su licencia por reincidencia; pero por casi 2,000€ (aprox. $50,000MXN) para poder adquirir tu licencia a los 18 años, más vale que apruebes correctamente los exámenes, teórico y práctico y que cuides la licencia. Además de esto, para poder aplicar por la licencia, deberás de pasar varias horas en una escuela de manejo, con conducción en diferentes rutas, pasar un examen de la vista y por supuesto conocer el reglamento de tránsito.
Asimismo, tienen un sistema de puntos que por cada infracción vas perdiendo puntos y en una determinada cantidad puedes llegar a perder la licencia un año o de por vida. Aclarando que la autoridad se encarga de verificar y revisar que las leyes se cumplan.
En su contraparte, cuando cumplí 18 años y fui por primera vez a sacar mi licencia, fue una experiencia completamente diferente. Al llegar a la oficina, me pasaron rápido y sin pedir un requisito especial más allá de los documentos tradicionales, después me dieron una “guía” para estudiar media hora antes del examen y cuando fue el examen el encargado de la oficina simplemente preguntó que si había estudiado y se propuso a contestar el examen por mí. Más adelante, me tomaron la foto, firme la licencia y en una hora yo ya tenía una licencia para conducir legalmente por Mexico sin que el Estado se asegurara que realmente yo había aprendido a manejar y/o conociera el reglamento de tránsito.
Deberíamos de voltear a ver las leyes y normas que existen en Alemania en esta materia y obligar a todos los aplicantes a una licencia, que cuenten con un curso de manejo básico. Solicitar que el Estado aplique exámenes prácticos y teóricos, y que se lleve un registro nacional de infracciones para poder detectar a los pilotos irresponsables. Y tal vez así, podríamos evitar reducir las 24mil muertes por año en Mexico comparadas con las 9mil en Alemania.