Empresarios agremiados a la Unión Industrial del Estado de México (UNIDEM) denunciaron que trabajadores de empresas de reparto padecen constantes abusos de policías municipales de Tultitlán, Coacalco, Cuautitlán, Naucalpan y algunos otros municipios del Estado de México, quienes los detienen por mover y entregar mercancía a sus clientes y exigen pagos de hasta seis mil pesos por trabajador por su liberación.
Las detenciones son diarias, a cualquier hora del día, para el reparto de alimentos, abarrotes, bebidas y mercancías en general, sin embargo se intensifican los viernes por la tarde e incluso los fines de semana, cuando a los trabajadores se les complica comunicarse a sus empresas por el horario laboral, los trasladan a juzgados cívicos donde permanecen aislados sin comunicación por varias horas hasta que cubren la multa.
Las unidades, en algunos casos, son remitidas al corralón y su personal presentado al Ministerio Público.
«A las empresas y sus trabajadores no se les puede dar un trato de delincuentes, y los cuerpos policiacos no deberían distraer en este tipo de acciones, ya que su función es la de mejorar la vialidad, y la seguridad de los municipios y no la de extorsionar a las empresas y sus trabajadores», denunció Víctor Castillo, presidente de UNIDEM.
Para cada persona se pide por su liberación cantidades que oscilan entre cinco mil y seis mil 500 pesos. Una vez que personal de la empresa o de la Unión recurre en su ayuda, las multas se moderan del orden de dos mil 500 a tres mil por cada chofer y ayudante. Estos casos también se registraron en Tlalnepantla y Ecatepec, sin embargo una vez que la UNIDEM dialogó con las autoridades de esos municipios, ya no se han detenido unidades.