* ¿A qué hora detienen a la CNTE?
Por Eduardo H. Limón Cervantes
Ayer hubo más de 67 manifestaciones en diversos puntos de la ciudad y paro de labores en 267 escuelas, para apoyar a la CNTE, lo cual derivó en 15 bloqueos, dos marchas y dos plantones, a todo ésto le sumamos las decenas de bloqueos en carreteras del país, principalmente en Oaxaca.
Los mozalbetes de la CNTE pretendieron bloquear la Supervía y otras arterias principales como Francisco del Paso y Troncoso, Calzada de Las Bombas, Calzada de la Viga, Glorieta de San Jerónimo, Periférico y Tlalpan, Izazaga y Eje Central, Calzada de Tlalpan y Viaducto, Avenida Constituyentes, Rojo Gómez y Eje 4 Sur, entre otras.
Es por ello que exijo a los gobiernos federal y capitalino, dejar de consentir a la CNTE, porque las reformas educativas ya fueron aprobadas y estos malos profesores insisten en violentar la ley. No tenemos por qué continuar aceptando caprichos de unos cuantos maestros, que con cualquier pretexto se niegan a trabajar y han hecho de esto su modus vivendi.
Los que se dicen profesores deben dejar de mentir, porque en todo este tiempo no han hecho alguna propuesta racional. En las reformas educativas fueron escuchados, pero nada bueno aportaron.
Las mesas de diálogo con el titular de Segob, Miguel Á. Osorio, han sido infructíferas, ya que los pseudomaestros se niegan a aceptar la Reforma Educativa, la cual no se han molestado ni en leer; porque escuchan las mentiras del nefasto López obrador.
Pero no por eso se va a detener la reforma educativa, la educación de calidad. Estos malos profesores paristas mienten, pues se les dio oportunidad de que hablaran, y callaron. No tienen el valor civil siquiera para reconocer sus errores y ahora quieren negociar. Lo que ignoran es que la ley no se negocia, se debe respetar y si no lo hacen, entonces que se atengan a las consecuencias para acabar con falsas versiones que circulan en las redes sociales.
Urge ya la implementación de operativos de fuerzas policiales de los tres niveles de gobierno. Me parece que esta acción puede ser la vía para evitar que se presenten nuevos hechos que colapsen a la gran capital y al país entero. Es más, yo les echaría a las Fuerzas Armadas.
Y como decía mi compadre Chón: «Recuerde, compadre, que las fuerzas armadas sirven a la patria sirviendo al pueblo».
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