REDACCIÓN
La huelga en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), que cumple 55 días de haber estallado no se resolverá a través de amenazas ni con posturas unilaterales o autoritarias como lo pretenden hacer las autoridades de esta casa de estudios, sino a través de le negociación y los acuerdos entre las partes, afirmó la dirigencia del SITUAM.
El Sindicato Independiente de Trabajadores de la Universidad Autónoma Metropolitana (SITUAM) acusó que las autoridades de esta casa de estudios son las responsables directas de que continué el paro de labores, ya que no han presentado propuestas serias que atiendan los reclamos de los trabajadores administrativos y académicos.
En conferencia de prensa, el secretario general del SITUAM, Jorge Dorantes Silva, acompañado por Antonio Venadero, Griselda Martínez Soria, Betza Arzola, Marco Gómez, Marcia Gutiérrez González y Artemio Chávez aseguraron que el fondo de resistencia para mantener la huelga es suficiente y además se cuenta con el apoyo económico y moral de otras organizaciones sindicales.
Aseguraron que la Casa Abierta al Tiempo es una institución sólida y no se va a perder el trimestre, a pesar de la campaña de desprestigio que han orquestado las autoridades de la rectoría.
Indicaron que en todas las asambleas seccionales y en el Comité de Huelga se acordó rechazar el ultimátum expresado por el secretario general de la universidad el pasado 25 de marzo.
No aceptamos, dijeron, de ningún modo cualquier tipo de amenaza que violente los derechos laborales de los trabajadores y que provoque un bloqueo de las negociaciones.
Consideraron que la propuesta salarial de las autoridades universitarias no ha cambiado en nada desde el inicio de la huelga y su única respuesta ha sido una proposición de acuerdo que fue retirada de la mesa por el SITUAM, pues no incluía propuesta alguna de mejora salarial.
Se trataba, agregaron, sólo de una promesa incierta para gestionar recursos adicionales sin ningún tipo de garantía.
Afirmaron que la falta de voluntad de los funcionarios por resolver el conflicto y su actitud autoritaria muestran que poco les importan las consecuencias, que por su cerrazón, afectan las actividades de la institución.
El desprecio mostrado por los funcionarios en las negociaciones, abundaron, es un ejemplo de lo que muchos trabajadores padecen de manera cotidiana y eso explica, en parte, el estallamiento de la huelga en la UAM.
Manifestaron que es evidente que los funcionarios no han ofrecido soluciones razonables y satisfactorias, pero, también, se han identificado responsabilidades en las dependencias del Gobierno federal que pueden aportar una solución a este conflicto laboral.
En particular, señalaron, las omisiones de las Secretarías de Hacienda y de Crédito Público y de Educación Pública para coadyuvar a resolver este problema, sin intervenir en la autonomía de la universidad.
Además, consideraron, la mediación impropia de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, al permitir un desplante como el realizado por el secretario general en la última ronda de negociaciones, entorpece la solución del conflicto.
Establecieron que el sindicato siempre se ha mostrado flexible y abierto al diálogo, pero «en virtud de que nos asiste el derecho, la razón y la justicia, los trabajadores universitarios mantendrán sus demandas de incremento salarial y de revisión a las violaciones del contrato colectivo de trabajo, a pesar de los intentos de intimidación que en nada abonan a una solución».
Los dirigentes sindicales señalaron que el alargamiento de la huelga se debe comprender en el contexto del momento político actual. Desde hace más de 25 años, afirmaron, SITUAM ha cuestionado el abuso del presupuesto y su distribución inequitativa.
Denunciaron que el anterior rector y secretario general de la UAM tienen el interés de derrocar al actual aprovechando el paro de labores y que no van a caer en ese juego.
Anunciaron que enviarán una carta a las autoridades laborales y a los funcionarios de la rectoría para reanudar las negociaciones mañana jueves.
