Milán, Ita.- Por segunda ocasión en su carrera, el ciclista español Alberto Contador se proclamó rey del Giro de Italia, tras agenciarse con tiempo total de 88:22:25 horas la edición 98, la cual finalizó con un trayecto de Turín a Milán.
El «Pistolero» hizo sonar la Marcha Real por tercera vez en la ronda italiana, luego de sus alegrías en 2008 y 2011, aunque ésta última fue una de las que le retiraron cuando dio positivo por clembuterol. Ataviado con la «maglia rosa» y escoltado en el podio por dos ciclistas del equipo Astana, su compatriota Mikel Landa y el local Fabio Aru, el jefe de filas del Tinkoff Saxo consumó su revancha personal con el ingrediente extra de que pasó las últimas 15 etapas con el hombro izquierdo luxado.
La sonrisa del madrileño en el lugar de honor también tenía de por medio una descarga de alivio, luego esa caída en la sexta jornada, de perder el liderato en la décimo tercera fecha y sumar un nuevo percance físico, con un golpe en la pierna izquierda.
En la contrarreloj se recuperó de esos reveses y volvió a meter en cintura a la dupla del Astana, que animó la competencia y acabó como la mejor novena de entre las 22 que iniciaron esta aventura.
Un nuevo apuro pasó el pinteño antes de completar esta vigésimo primera etapa con los brazos en alto, pues la víspera padeció en el ascenso a Sestriere, pero el margen sobre Aru era tal que se dio el lujo de ceder dos minutos y 25 segundos respecto al italiano. Ahora Contador podrá presumir de siete «grandes» en su palmarés, el cual incluye tres Vueltas a España (2008, 2012 y 2014), dos Tours de Francia (2007 y 2009) y este par de Giros (2008 y 2015).
El de este día era «simplemente» un trámite de 178 kilómetros que el español cumplió al ingresar en el puesto 46, a 18 segundos del vencedor de esta jornada final, el belga Iljo Keisse del Etixx Quick-Step.
El dorsal 65 del Giro le ganó el mano a mano al australiano Luke Durbridge del Orica GreenEdge y paró el cronómetro en 4:18:37 horas, para ser el mejor de los 163 que completaron la «corsa rosa» y, de paso, rompió quinielas que colocaban como favorito al local Giacomo Nizzolo.
