Por Alelhi Rodríguez
La estrategia de vacunación de COVID-19 se convirtió en una fuente de ingresos para la familia Cruz, que adaptó su taxi como un café internet itinerante, para ofrecer servicio de fotocopias e impresiones en diferentes módulos.
Carlos Cruz Jiménez, operador de la unidad con placas de la Ciudad de México, acompañado de su familia, recorren varios estados de la República para prestar los servicios de papelería, como auxilio a quienes por algún motivo olvidaron un requisito impreso.
«Yo vengo ofreciéndoles formatos, cualquier tipo de impresión, vengo a tratar de ayudarlos y que me ayuden de cierta forma», detalló.
Cruz Jiménez, originario de la alcaldía Iztacalco en la capital del país, contó que hasta antes de la pandemia tenía un cibercafé en su lugar de residencia, sin embargo, dada la emergencia sanitaria por COVID-19, su negocio permaneció cerrado, «nos quedamos sin trabajo, entonces, salimos ahora a las vacunas a poder trabajar, tener algo para nuestras familias».
Querétaro, Tlaxcala y el Estado de México son algunas de las entidades federativas que este joven y los suyos han recorrido para sobrellevar la crisis económica.
Esta vez, fue en Toluca, durante la vacunación de jóvenes de 18 a 29 años, donde la familia se instaló de manera improvisada y sobre una mesa colocaron una impresora, un escáner y dos computadoras conectadas a la batería de su automóvil, y con esto generar un ingreso económico.
Hasta 30 personas son las que llegan a atender; de 5 a 15 pesos son los que obtiene por persona y los servicios que más solicitan es la copia o reimpresión de un documento, o bien, el primer registro para acceder a la vacuna.
La familia Cruz espera que pronto termine la pandemia para regresar a un trabajo fijo; en tanto, seguirá viajando en su taxi para mejorar su economía o, al menos, subsistir.
