POR Gerardo GARCÍA
En la biosfera de la Mariposa Monarca perteneciente al Estado de México, existe ya la presencia de dicho insecto que recorrió cientos de kilómetros para descansar en los árboles oyameles ubicados en la zona sur.
De acuerdo a la Comisión Nacional de Áreas Protegidas (CONANP), estos insectos arribaron a finales de septiembre y no de octubre que es la temporalidad histórica, además que las colonias se vieron nutridas.
En el ejido de Piedra Herrada la mariposa monarca sobrevuela sus hectáreas y se resguardan en los oyameles y se hidrata de los manantiales de la región.
Los prestadores de servicio, es decir, los ejidatarios están a la espera de visitantes, pero temen que con el desarrollo de la pandemia de COVID-19, se vea disminuida la llegada y con ello sus ingresos que cada año tienen.
La monarca arribó al suelo mexiquense desde la segunda semana y junto a ellos paulatinamente los ciudadanos, quienes arriban en familias completas, entre niños y adultos mayores, quienes en su mayoría acuden con cubrebocas.
En el ejido de El Sauco ya hay movimiento de recorridos para llegar a Puerta Herrada, como desde la entrada principal del santuario.
Cada persona que llega, entre ellos connacionales, deben desembolsar 70 pesos para su ingreso a esta zona protegida, adicional al costo del recorridos a caballo y el acompañamiento con guía.
En la entidad existen tres santuario: Ejido del Capulín y Macheros, Piedra Herrada y La Mesa, en el primero ya se tomó la decisión de no dar acceso al público para evitar contagios de COVID-19.
En Michoacán desde este 28 de noviembre se autorizó el pase al lugar de la monarca para todo el público.