Isabel Blancas
*Desde el concierto de lágrimas por primerizos,
hasta alegría de volver a las aulas en niños estudiosos.
El inicio de ciclo escolar significa cambios importantes en la forma de vida social, nuevos maestros, compañeros, escuelas, hábitos, rutinas, entre otras cosas.
La mayor parte de los niños van felices, muchos nerviosos, algunos más con miedo pero todos con la esperanza de tener un excelente año escolar pues tienen la fortuna de estudiar y aprender, cosa que en estados como Oaxaca, no podrán hacer.
Para los que entran a primaria o secundaria la experiencia ya es conocida; sin embargo, para los pequeños que apenas inician su vida escolar son los que más recienten esta separación pues no están acostumbrados a estar lejos de su familia, aunque sean un par de horas.
Lagrimas, llanto, gritos, berrinches y mucho miedo es lo que puede verse en los jardines de niños que reciben a los pequeños por primera vez.
«Son sentimientos encontrados y me da mucha nostalgia dejar a mi niña en el kinder por primera vez, se me parte el corazón porque a mí también me duele separarme de ella pero sé que es necesario», dijo Luz María Lorenzo, quien con lágrimas en los ojos se despidió de su pequeña que también lloraba en su primer día de clases.
También hubo padres de familia que no calcularon los tiempos, por lo que llegaron hasta media hora más tarde para iniciar actividades.
«Se nos hizo tarde pero además el tráfico está espantoso por todos lados, en un tramo que normalmente te haces cinco minutos ahora eran 15 ó 20», reconoció Laura Patricia Esquivel, quien llegó tarde a dejar a su pequeño en una escuela ubicada en la avenida Juárez.
El operativo de seguridad que se montó por parte del gobierno estatal, federal y municipal se dejó sentir pues en cada esquina de la zona centro de la capital del estado había policías, agentes de tránsito y militares, pues además se tuvo la visita del presidente Enrique Peña Nieto en la capital del estado.
