Por Guadalupe de la Cruz
Desde hace un año las actividades religiosas de Semana Santa en el Valle de Toluca se llevan a cabo de manera virtual, debido a la pandemia por COVID-19.
La Arquidiócesis de Toluca de forma oportuna solicitó a las iglesias que forman parte de esta, que se abstuvieran de realizar actividades que congreguen gente, sobre todo en la llamada semana mayor, a fin de evitar posibles contagios del coronavirus.
Es así que desde la vigilia pascual, las actividades fueron con un aforo del 40 por ciento y transmitiendo las celebraciones vía redes sociales, respetando las medidas de sanidad y sana distancia.
En la catedral de Toluca las actividades siguen siendo con poca afluencia, con uso obligatorio de cubrebocas y de gel antibacterial; se suspendió el tradicional lavatorio de pies que se realizaba el jueves santo, la representación del viacrucis, así como la marcha del silencio que se desarrollaba la tarde-noche del viernes santo.
Autoridades eclesiásticas comentaron que desde hace un año se decidió no contribuir a la propagación del SARS-CoV-2, pues todas las actividades requieren de grandes concentraciones de gente, por lo que pensando en la salud de la feligresía, se decidió omitirlas.