La joven comenzaba a estudiar criminología y además jugaba softbol, tenía 17 años.
Por Gerardo Mendoza
Toluca- “Le dio por otro lado”, fue uno de los últimos mensajes que pudo mandar Ana Alondra Montealegre Ortega, de 17 años de edad, antes de ser asesinada. Hoy, familiares, amigos y organizaciones civiles exigen que este feminicidio no quede en la impunidad.
La chica, que se iniciaba en la carrera de criminología, llegó sola la noche del domingo 3 de octubre a la central camionera de Toluca.
Había asistido al municipio de Naucalpan, donde los fines de semana jugaba softbol.
Ella era originaria de Valle de Bravo, sin embargo, vivía en la capital mexiquense; entonces, como otra veces, llamó por teléfono y dijo que ya iba para su casa.
Las investigaciones establecieron que tomó un taxi, y luego todo fue un misterio, hasta que la mañana de este lunes 4, la hallaron muerta en San Diego de los Padres.
Solo pasaron unas horas desde que desapareció y, al localizarla, estaba semidesnuda, con signos de violencia.
La joven todavía alcanzó a mandar algunos mensajes a sus amigos, porque su celular ya tenía poca batería, “le dio por otro lado (el taxista)”, según se pudo conocer.
Al no saber nada de ella, la buscaron; incluso la FGJEM inició una ficha a través del Programa Odisea.
Lamentablemente, vecinos de San Diego, al iniciar sus actividades, localizaron los restos de la joven que enseguida fue identificada como Alondra.
