En los primeros días del gobierno de Donald Trump arremete contra comunidad trans.
Las personas trans no podrán tramitar su pasaporte, participar en competencias deportivas, entrar al ejército y otras disposiciones más.
Trump decreta recorte para atención a personas con VIH lo que perjudicaría a 2º millones de personas en el mundo.
En campaña para la presidencia de los Estados Unidos de América, Trump mantuvo un discurso antitrans en todos los Estados que visitaba, lo que generó una preocupación de las poblaciones diversas en el país vecino del norte.
Por lo que no es sorpresa que este martes Trump decretara poner fin a la financiación gubernamental para cirugías de transición de género de menores en Estados Unidos, tanto químicas como quirúrgicas, y prometió defender su postura por todos los medios legales, refrendando su discurso en la toma de posesión, donde sentencio que solo existían dos géneros masculino y femenino.
Su cambio radical de política en contra de la agenda LGBTTTIQANB+ que ahora nombran peyorativamente como agenda “woke” no siempre fue así, pues en el 2016 cuando Trump llego a su primer mandato menciono en entrevista a medios de comunicación no tener problema alguno sobre el matrimonio igualitario.
Pero esto ha cambiado, desde la oficina Oval se firmó una orden ejecutiva que prohíbe el uso de marcadores de género no binarios en documentos oficiales. La medida que entro en vigor de inmediato suspende las solicitudes de pasaportes con el marcador “X” para personas no binarias, así como cualquier modificación en la identidad de género registrada en pasaportes existentes, además se ha prohibido la participación de atletas trans en competencias profesionales, la prohibición de que puedan servir en las fuerzas armadas del ejercito de los Estados Unidos y el reacomodo de personas privadas de su libertad a la cárcel acorde a su género al momento de nacer y no con el que se asumen, lo que pone en grave peligro para las personas trans.
Pero sus políticas no solo se centran en el repudio de las personas con identidad de género no normativa, sino que ahora son blanco de ataque las personas con VIH pues ha tomado medidas para detener el suministro de medicamentos antirretrovirales, así como para la malaria y la tuberculosis, o suministros médicos para recién nacidos, en países apoyados por USAID en todo el mundo.
Lo que pone en peligro a 20 millones de personas que viven con VIH y que dependen exclusivamente de este financiamiento que otorga el gobierno estadounidense para sus tratamientos, por ello no es raro que se comparen dichas políticas de Trump con las que en su momento personajes como Hitler implemento cuando ataco a las personas homosexuales, discapacitadas y otras minorías.
A pocos días del nuevo gobierno de Estados Unidos ya se fijó una clara postura de retroceder en los derechos que en años recientes se han reconocido para la diversidad sexual, y que claramente representan un futuro incierto en que la comunidad diversa tiene dos caminos emprender una resistencia social, política y jurídica o esperar cuatro años marcados por la exclusión de quienes no entran en la heterónoma.