REDACCION
El expresidente Felipe Calderón Hinojosa afirmó que la condonación de impuestos no es una facultad ni decisión del Ejecutivo federal, pues se trató de un beneficio para los contribuyentes previsto en la ley fiscal.
La víspera, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) dio a conocer que en los sexenios de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto fueron condonados nueve mil 941 condonaciones de impuestos, lo que derivó en que 172 mil 335 millones 775 mil 366 pesos no ingresaran a las arcas del gobierno federal entre 2007 y 2015.
Calderón Hinojosa explicó que las condonaciones de impuestos aplicadas en su gobierno estaban consideradas en un programa previsto en el artículo séptimo transitorio de la Ley de Ingresos vigente que buscaba recuperar la cartera vencida del SAT condonando recargos y multas muy onerosos.
Refirió que durante su gobierno se cobraba casi 2.0 por ciento por cada uno de estos conceptos al mes, lo que hacía impagables los créditos por gastos de ejecución, pero que se les condonaba sólo si los contribuyentes se ponían al corriente de 2004 a 2006 y hubieran sido objeto de revisión de sus cuentas.
Subrayó que en el caso de los créditos fiscales, para la autoridad hacendaria era mejor hacer un descuento y recuperar algo con un programa de pronto pago que perder recursos.
“No son decisiones que toma el presidente, yo no hice actos de condonación a favor de nadie, todas las personas que aparecen en esa lista fue porque se acogieron al programa del SAT y se refería en su mayoría a créditos fiscales a punto de prescribir y que buscaba dar incentivos para que la gente se regularizara”, sostuvo.
Tras asegurar que desconocía la lista de beneficiarios dada a conocer ayer, el expresidente indicó en entrevista en Por la Mañana, de Grupo Fórmula, que si hay algunos créditos fiscales que se hayan condonado irregularmente, “yo soy partidario de que se castigue”.
En el caso de artistas y cantantes, señaló que en mayoría de los casos están mal asesorados y creen que pueden saltarse la parte fiscal, pero cuando se dan cuenta de la falta, tienen que negociar y en muchos casos se les hace un descuento “de lo viejo”, aunado a que se les pone de ejemplo para que la gente pague.
Felipe Calderón descartó que el SAT hayan cometido alguna arbitrariedad, “lo dudo rotundamente, pero si la hay, soy el primero en exigir que vayan y les cobren”, puntualizó.