Redacción
El debate por los libros de texto a nivel nacional continúa pese a que nos encontramos a menos de un mes del inicio del ciclo escolar para educación básica. Hasta el momento en cuatro estados de la república han tomado la determinación de no darles y uso o optar por otras vías.
El material preparado por la Secretaría de Educación Pública (SEP) para que los niños del país lo utilicen durante el ciclo escolar 2023-2024, se ha convertido en el centro de críticas y reproches. Además de señalar errores de redacción y ortografía, los grupos de padres de familia han expresado que estos libros presentan una carga ideológica afín al actual gobierno.
En este contexto varios estados de México han decidido suspender la distribución de estos libros y han manifestado su negativa a que los estudiantes de sus regiones trabajen con este material.
En Jalisco, el gobernador, Enrique Alfaro, aseguró que la educación no debe verse afectada por un conflicto legal en torno a la distribución de los libros de texto. Ha enfocado su esfuerzo en un sólido proyecto educativo que brinda certeza tanto a los maestros como a los estudiantes de educación básica, a través de la iniciativa Recrea «Educar para la Vida».
Otro estado que ha detenido la distribución de los libros es Guanajuato. Después de que la Unión Nacional de Padres de Familia obtuviera un amparo para frenar la logística de distribución, el organismo educativo estatal retiró los libros de las aulas de manera tajante. Aunque el secretario de Educación, Jorge Enrique Hernández Meza, considera preocupante no entregar estos libros, sostiene que los problemas de contenido e ideología pueden resolverse mediante estrategias de enseñanza y materiales adicionales implementados por los estados.
En Chihuahua, la gobernadora Maru Campos, del Partido Acción Nacional, ha criticado el contenido de los libros de texto, alegando un «alto contenido ideologizante». En respuesta, ha ordenado que estos libros no sean distribuidos a los estudiantes del estado. Aunque la Suprema Corte de Justicia de la Nación aún no ha tomado una decisión definitiva sobre la distribución de los libros, la secretaria de Educación y Deporte de Chihuahua, Sandra Elena Gutiérrez, ha afirmado que, en caso de una resolución en contra, se trabajará con el plan de estudios actual.
Por otro lado, en Colima, el secretario de Educación, Francisco Saracho Navarro, ha expresado el interés de la dependencia por revisar el procedimiento de elaboración de los nuevos libros de texto. Hasta el momento, los libros de texto actuales se mantendrán bajo resguardo y no serán entregados. Se espera que una audiencia constitucional el 18 de agosto determine si los amparos presentados por organizaciones civiles, incluida la Unión Nacional de Padres de Familia, son válidos.
